Cuando un niño acude por primera vez a una clínica dental, se inicia un vínculo que va a prolongarse a lo largo de su vida. El resultado de esta visita va a marcar el comportamiento futuro no solo del niño sino del adulto, de ahí que sea importante subrayar la importancia de una experiencia positiva en este primer encuentro. En Clínica Gallego disponemos de un proyecto en el que los más pequeños son la referencia para llevar a cabo nuestra labor, para la que contamos con profesionales odontólogos que están poniendo en práctica soluciones acordes a la conducta de cada niño en la consulta.

Variables Conductuales

14La principal característica de una primera visita a la clínica dental es la novedad. Debido a esto, las percepciones que experimenten van a conformar una actitud hacia esta nueva experiencia, que va a estar influenciada por una serie de condicionantes. El primero de ellos es el ambiente odontológico, en el que es importante que el niño se sienta confiado y se evada del estado de ansiedad que representa una sala de espera, algo que puede conseguirse a través de un espacio aparte dedicado, con juegos y otros elementos de entretenimiento. Otro de los elementos clave para la correcta adaptación es el trato con el equipo; el odontólogo debe crear un ambiente agradable y de confianza, estableciendo en todo momento una comunicación con un tono relajado y adaptando los términos al lenguaje del pequeño. Se trata de hacerle partícipe, basando su consulta en el «decir, mostrar y hacer» para que el niño comprenda cada paso dado tanto por el odontólogo como del resto del personal.

Sin embargo, uno de los pilares fundamentales que marcará el comportamiento infantil es la influencia por parte de los padres. Hay que evitar la ansiedad de los padres ante las visitas de los niños al dentista ya que, en general, suelen ser pacientes muy buenos y son los padres los que les transmiten las inseguridades relacionadas con la odontología. Es recomendable enfocar la visita de manera positiva y huir de estereotipos.

Por otra parte, la variable de la edad del niño marcará la forma de actuar de todo el entorno, que tendrá que adecuarse a las necesidades de estos. Adaptar la consulta odontológica a las necesidades de cada niño para que a través de su colaboración con el especialista se logre una actitud positiva es muy importante para sus futuras visitas. Las reacciones están condicionadas por las diferentes etapas de desarrollo, por lo que es imprescindible amoldarse a cada una de ellas.

Correlación de actitudes y respuestas

A pesar de que cada niño es diferente y sus respuestas varían de uno u otro, es esencial identificarlas y actuar en consonancia. Si muestra una conducta tímida, lo mejor será buscar la complicidad a través de un lenguaje suave, y estimularle a la participación; si se muestra desafiante, la comunicación marcará la diferencia, ya que debe ponerle de manifiesto la necesidad de colaboración mutua de la mano de un profesional que se muestre seguro. Si por el contrario se manifiesta una gran tensión en el niño, es necesario velar por su comodidad y prever sus reacciones, transmitiendo de forma constante tranquilidad y animándole a cambiar su estado de ánimo, mostrándole que puede bajar su nivel de alerta. Pero si la reacción del niño a la consulta es el llanto, se debe buscar disminuir la ansiedad a través del comportamiento cercano, a través distracciones para conseguir una implicación directa de cada paso, para que vean la figura del odontólogo como una figura cómplice.

Junto con esto, es esencial aplicar los refuerzos positivos, para que el pequeño quiera repetir la conducta de la que ha obtenido una respuesta agradable. Esto se puede hacer a través de refuerzos materiales, como un pequeño regalo, una pegatina o un globo, o verbales, como elogios y felicitaciones. Así se impondrá un patrón de comportamiento futuro que evitará reacciones negativas cuando se repitan dichos estímulos.

Actividades enfocadas a los más pequeños

Como somos conscientes de que los niños necesitan un ambiente relajado y que le influya positivamente, en la Clínica Gallego disponemos de profesionales con la formación necesaria para convertir su visita en una experiencia satisfactoria y estimulante para los más pequeños.

En este sentido, organizamos de forma periódica actividades orientadas a los niños con objeto de ofrecer propuestas interesantes, apropiadas para la edad y relacionadas con un tema determinado para introducirlos a la importancia de la correcta higiene dental y facilitar sus futuras visitas al dentista. Con estos eventos pretendemos reforzar nuestra implicación con los pequeños y lograr que la visita al dentista no sea un hecho traumático para ellos sino algo ameno y divertido. Aprovechamos para mostrarle el consultorio a los niños, ver las salas de examen y otras dependencias para ayudarles a aclimatarse con las instalaciones y el personal de la clínica y que con ello se sientan cómodos en todo momento.