El trabajo del cirujano dental engloba tanto el diagnóstico como el tratamiento quirúrgico de anomalías, enfermedades y lesiones en las diferentes estructuras de la boca, desde los dientes hasta sus tejidos. A pesar de que el trabajo de extracción es el más común y se hace de forma rutinaria, existen numerosos procedimientos que requieren la atención de un cirujano dental especializado que corrija pequeños desajustes y nos ayude a mantener una adecuada salud bucodental.
En Gallego Odontología Avanzada sabemos que una cirugía dental puede generar cierto temor, pero con los medios actuales cualquier operación dental es más sencilla y menos dolorosa, le recomendamos la lectura de nuestro artículo donde damos consejos para evitar el miedo al dentista.
INTERVENCIONES MÁS COMUNES DE CIRUGÍA DENTAL
Extracción de muelas del juicio o cordales: Es importante prestar atención al desarrollo de estas últimas muelas, ya que suelen dar problemas en la mayor parte de los casos. Esto es debido a la falta de espacio y por ello en su intento por salir, pueden provocar apiñamiento e incluso inflamación o supuración. El recomendable no esperar a un episodio de dolor intenso ni a su sintomatología y también extraerlas antes de los 20 años, ya que así se evita que las raíces se hayan formado por completo y puedan provocar daños al extraer las piezas.La extracción se lleva a cabo generalmente con anestesia local, por lo que es indolora y de duración moderada en la mayoría de los casos. Si la muela no ha erupcionado, se suele hacer un pequeño corte que facilita la extracción, que será completada con algunos puntos de sutura y que se retirarán los pocos días. El postoperatorio incluirá hielo para la hinchazón, dieta blanda y pautas de higiene adecuadas a cada caso.
Extracción de otras piezas – dientes incluidos: Los dientes incluidos son aquellos que, bien por completo o de forma parcial, no han erupcionado y permanecen por dentro del hueso. Es muy común que ocurra en los caninos superiores debido a que son los últimos en salir y se suelen encontrar con problemas de espacio. Cuando aparece un diagnóstico de este tipo, lo más recomendable es actuar para colocarlo en su lugar, ya que dejarlo dentro puede conducir a patologías de tipo infeccioso. La extracción total en este caso se elegirá como último recurso, si no se puede colocar o existe una patología grave.
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Fenestración dentaria: Este procedimiento, indicado para dientes incluidos, consiste en eliminar hueso y mucosa alrededor del diente incluido lo que permitirá al especialista colocar un bracket que devuelva la pieza a su espacio original en la arcada. Como en el caso, anterior los caninos suelen ser los que reciben este tratamiento de forma más habitual, dada la importancia que tienen en la estructura dental por su fortaleza y su misión en la mordida.Para el éxito de este procedimiento, el cirujano realizará una incisión que abrirá un espacio en la encía (fenestra) gracias a la cual dejará parte del diente al descubierto, permitiendo al ortodoncista colocar un bracket que ejercerá de vehículo y arrastrará el diente hasta su espacio en la arcada, donde ya se habrá preparado el espacio para incluirlo. Este tratamiento se realiza con anestesia local y requiere la coordinación de los especialistas en el postoperatorio para completarlo con éxito.
Frenillos: La importancia de los frenillos es doble, ya que no solo unen superficies contiguas, sino que también una longitud inadecuada puede derivar en problemas fonéticos, periodontales u ortodóncicos. Si el frenillo labial superior es demasiado largo puede producir la separación de los dientes, problemas al mover el labio y problemas al hablar. En el caso del labial inferior, ocasiona menos problemas, pero puede producir retracción gingival debido a que no se puede proceder a una higiene dental correcta. Así mismo, si el frenillo lingual es excesivamente corto, puede provocar alteraciones en el lenguaje, en la lactancia y en la deglución, interferir con las prótesis dentales o desgarrarse por el contacto con los incisivos inferiores.Para corregirlo, se lleva a cabo una intervención que lo elimina o lo reubica en su lugar indicado, tratado con anestesia local e incluso si es con láser no requiere de sutura.
Cirugía periapical: Cuando se producen lesiones al final de la raíz del diente como consecuencia de una infección crónica que no se ha podido solucionar, es necesario intervenir a través de estas cirugías. En esta intervención, se extraerá la lesión del final de la raíz y se colocará un empaste especial que resolverá el problema. La ventaja de esta cirugía es que permite conservar la pieza dental, pero en ocasiones no acaba con la infección, por lo que finalmente se produce la extracción. Esta intervención requiere anestesia local y puntos de sutura una vez sellada la raíz.
Como en la mayoría de los problemas relacionados con la salud bucodental, un diagnóstico temprano garantiza que el tratamiento se realice de la forma menos agresiva posible y que minimice las molestias del paciente. En Gallego Odontología Avanzada contamos con expertos cirujanos que estudiarán cada caso y llevarán a cabo los procedimientos con las mejores técnicas aplicadas de forma personalizada. Nos preocupamos por el seguimiento de cada paciente, desde el momento que detectamos el problema hasta que se completa el tratamiento, contribuyendo a su tranquilidad con el seguimiento de su evolución después de completar su cirugía, lo que consigue eliminar casi por completo los problemas tras la intervención.
Los especialistas de Gallego Odontología Avanzada sabemos que el éxito de cada procedimiento radica en que desde tempranas edades se siga el desarrollo de la estructura bucal, ya que mediante revisiones, radiografías y cuidados a lo largo del crecimiento se pueden prevenir y combatir una gran parte de problemas en adultos. Por ello, te recomendamos que te acerques a nuestra Clínica para que podamos darte las mejores soluciones.
